sábado, 5 de enero de 2008

Queridos reyes magos...

Ayer pasé una tarde entera de compras y al final conseguí encontrar algo, menos mal.

Después de estar la tarde entera de compras me tocó hacer la sesión de envolver todos los demás regalos, así que como me tocaba a mi esa tarea lo que hice fue poner todos mis regalitos por a parte, así parece que son más aunque sean poco.

Lo malo de esto esto es que las vacaciones han llegado a su fin, y por lo tanto los exámenes están demasiado cerca. En el módulo tengo la recuperación no sé que día pero es al poco de volver y aun no he mirado nada, tampoco sé si me molestaré en mirarlo. Espero al menos que me pongan de nuevo internet en casa pronto para no tener que quedarme horas extra en la uni por la tarde, aunque me da que es mucho pedir.


Y además ayer por la tarde me llamó la madre del chico al que doy clase para que fuera hoy, pero le dije que tenía que trabajar y no podría ir hasta el lunes, simplemente porque hoy no me apetecía currar y mañana tengo reunión familiar. Lo que más me chocó es que parece que la mujer se mosqueó porque tenía otro trabajo, se debe creer que estoy totalmente disponible para cuando ellos quieran porque me dijeron que se iban de viaje a no sé donde y vendrían un día de esta semana, si venían pronto me llamaban para dar clase, y como me he negado por otras cosas pues se pilló el mosqueo, o eso me parece. No puede pretender que esté a su disposición siempre que el niño quiera, porque tiene que entregar unos deberes y dice que no los puede hacer sin mi, pero es culpa suya el no haberme dicho nada de ello antes y mucho más el no haberlos empezado él por su cuenta. Seguramente el chico este suspenda, pero porque se cree que porque yo vaya una hora y media a la semana ya puede olvidarse de estudiar por su cuenta, y seguramente la culpa de que suspenda es mia, como la mayoría de las veces que los padres no quieren admitir que sus hijos no estudian.

Allá ellos, mientras que me paguen y me dé para mis cosillas la cosa va bien.


Bueno, yo mientras disfrutaré de mañana y los regalos, aunque cuando vengan mis primos tendré que guardar la wii para que no jueguen con ella, no vaya a ser que la rompan o se carguen cualquier otra cosa de lo brutos que son.

Ya pondré mañana una foto con todos los regalos abiertos.

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