Hay veces en la vida en las que vuelves la vista atrás y te das cuenta de las cosas que echas de menos, de lo bien que te hacían sentir y lo mucho que trabajaste por ellas en su momento.
Un de esas cosas es esto. Le dediqué tres años de mi vida para luego decidir dejarlo en el olvido, tanto tiempo acumulado, tantas experiencias, tantos deseos, tanto de mi.
Por eso hoy he decidido volver a dejar ese trocito de mi todos los días, volver a contar lo que me pasa y hablarle a alguien que desconozco y a mi misma a la vez. Poder compartir todas esas cosas que me dan tantas vueltas a la cabeza hasta que quedan plasmadas y olvidas la razón por la que te quitaban el sueño antes.
Y en esta vuelta hay muchas cosas cambiadas, demasiadas quizá para poder contarlas todas en un solo día, solamente diré que por fin siento que empiezo a encauzar mi vida, después de pasar unos meses en los que solo estaba por estar ahora vuelvo a ser yo y vuelvo a disfrutar de las cosas como antes. Sé que mucha gente de mi alrededor ha notado el cambio, incluso notaba que las cosas iban mal cuando yo ni me había dado cuenta, pero ahora mismo me alegro mucho de haber tomado una decisión bastante dura y radical. Lo he pensado mucho desde entonces y no me arrepiento de nada de lo que he hecho, bueno sí, me arrepiento de no haberlo realizado antes.
Este es mi nuevo rincón, un sitio donde no me tengo que recluir para huir de algo que no me gusta, un sitio donde puedo dedicarle solo el tiempo que me apetezca, un sitio donde puedo elegir estar.
Empiezo de nuevo a escribir por aquí con la misma ilusión que le puse el primer día, y espero que dure tanto o más como aquella vez que me prometí no faltar nunca.
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