sábado, 19 de enero de 2013

Poconosotros


Aquí os traigo el regalo tan guachi que le hice a Javi. Son dos muñecos de pocoyo de cada uno de nosotros. La verdad es que el suyo se parece mucho más a él que yo al mío, pero se hace lo que se puede con los medios que hay jejeje.

Hemos ido por la tarde a Humanes, para estar con la gente allí, pero a eso de las ocho ha habido una espantada general, cada uno por su lado.

Al final hemos decidido ir a casa de Vane y Julio a cenar, y como buenos cazadores que somos hemos salido Javi, Luisma y yo en búsqueda y captura de la cena. Nos hemos dicho de ir andando, que no estaba tan lejos, así que con el frío y con el viento nos hemos puesto en marcha. La cosa iba perfectamente hasta que hemos llegado al telepizza y en ese momento se han preguntado entre los dos que donde estaba el chino, resulta que uno estaba siguiendo al otro y el otro al uno, vamos que ninguno sabía donde estaba el chino y estaban andando sin saber.

Después de dar la vuelta a la manzana hemos preguntado a un par de chicos que pasaban por allí, y como estaba tan lejos y complicado de explicar nos han dicho que les siguiéramos. Resulta que nos hemos recorrido todo Humanes cuando estaba a dos calles de donde estábamos al principio. Y no solo eso, sino que al pedir para llevar se nos ha pasado por la cabeza que también podríamos haber llamado al chino para que nos lo entregaran a domicilio. Somos de lo que no hay.

Ya hemos cenado allí todos y nos hemos pasado la noche allí, unos jugando al billar otros hablando así por hablar, o comentando ciertas jugadas de estas semanas jejeje.

Ale, luego a casita y a dormir.

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