Un año sin ti

Hace justamente un año que me dejaste. Fue una mala noche sin poder hacer nada por ti y descubrir por la mañana lo que sabía que iba a pasar.

Fue un palo bastante duro porque había compartido tantas cosas contigo y me sentía culpable por no poder ayudarte.

Pero comprendí que es ley de vida y ese día iba a llegar en algún momento.

Ahora mismo escribir esto me está costando porque hacía mucho que no veía ninguna foto tuya, pero eso simplemente significa que sigues siendo muy importante para mi.

La vida sigue, de hecho hoy me han demostrado que tengo cosas más alegres en las que pensar, ya que de nuevo los jerbos han tenido crías. Esta vez han sido cuatro y ha sido una pequeña alegría junto con preocupación porque tendré que tomar medidas y separarlos para que no me llene de montones y montones de jerbos.

Gracias por esos momentos juntos y hacer que el tiempo que estuviste conmigo sea inolvidable.