domingo, 5 de agosto de 2007

Echarte de menos, querer tenerte aquí





Un día tranquilo. Levantarse tarde, hacer nada hasta la hora de la comida y después ir a Atocha para ver a Immel y Hard.

Despedir a Randy y quedarme en Madrid con ellos.

Cuando he vuelto a casa me ha dado la impresión de que no era un domingo sino un sábado, menos mal porque los domingos suelen ser deprimentes.


Hablar contigo me alegró el día.

No hay comentarios:

Publicar un comentario